Cuáles son los mitos alimentarios asociados al hipotiroidismo

Desde una dieta sin gluten a dificultades para bajar de peso, existe una larga lista de falsas creencias sobre esta condición. Una guía para saber qué comer.

Vamos a hablar de algunos mitos alimentarios relacionados, específicamente, al hipotiroidismo. Para empezar, recordemos que la glándula tiroidea forma parte del sistema endocrino y se encuentra ubicada en la parte anterior del cuello. La función de la tiroides es concentrar el yodo para producir las hormonas tiroideas (T4 y T3) que son almacenadas y luego se vuelcan al torrente sanguíneo para llegar a todo el organismo.

Estas hormonas regulan distintos procesos metabólicos tales como la producción de calor, el crecimiento y desarrollo, la reproducción, y el funcionamiento de los distintos órganos y sistemas,

Lo que puede suceder, cuando existe alguna situación anormal, es que se potencie o se disminuya la función de la glándula tiroidea. La más prevalente en Argentina es cuando se disminuye la función de la hormona, y se llama hipotiroidismo. Esto va a hacer que se vuelva más lento el metabolismo y, de alguna forma, va a interferir en un gran abanico de situaciones como, por ejemplo, puede provocar cansancio, posible aumento de peso, fragilidad en las uñas, caída del pelo, problemas de fertilidad, ausencia del ciclo menstrual, entre muchísimos otros signos y síntomas.

Cuando los niveles de hormona tiroidea están bajos, los procesos corporales comienzan a funcionar con lentitud, incluido el metabolismo (Getty)

Unas 750 millones de personas padecen alguna patología tiroidea en el mundo, según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Además, entre las personas afectadas por estas enfermedades, el 60% desconoce su condición.

Ante la aparición de síntomas, se debe consultar al médico. El diagnóstico es muy sencillo y el especialista va a solicitar los estudios pertinentes. El tratamiento consiste en el reemplazo hormonal a través de la levotiroxina. Lo que hace es reemplazar la función de la hormona que no está funcionando adecuadamente.

Con respecto a la alimentación, hay varios mitos que rodean a esta condición:

El primero indica que las personas con hipotiroidismo tienen que hacer una dieta libre de gluten. Esto es absolutamente falso, de ninguna manera cura el hipotiroidismo. Esta creencia quizás radica en la confusión frente a una falta de diagnóstico de enfermedad celíaca o de alguna intolerancia al gluten no diagnosticada a tiempo. Pero, de ninguna manera, las personas con hipotiroidismo tienen que dejar de consumir alimentos con gluten.

Las personas con hipotiroidismo deben llevar una dieta balanceada sin eliminar grupos de alimentos (Getty)

El segundo mito señala que las personas con hipotiroidismo tienen una dieta restrictiva y especial para esta condición. Esto tampoco es así. No existe sustento científico que justifique la eliminación de alimentos para curar el hipotiroidismo.

Estos pacientes tienen que tener una dieta variada, equilibrada, normal. El único cuidado que deben tener tiene que ver respecto a la toma de la levotiroxina para que no se interfiera su absorción. Lo tienen que hacer en ayunas y esperar 30 minutos para desayunar. El desayuno debe ser bajo en fibras, que no incluya ni cereales integrales, ni frutas, ni frutos secos en ese momento, después pueden realizar una dieta totalmente normal.

Y el último mito dice que las personas con hipotiroidismo no pueden bajar de peso. Esto es totalmente falso. Ya hemos dicho que con la terapia de reemplazo hormonal pueden tener un metabolismo totalmente normal. Esto tiene que ser controlado por el endocrinólogo y, si es así, no existe ninguna situación por la cual el descenso de peso se vea afectado.

Estas son algunas situaciones específicas y algunos mitos que encontramos con respecto al hipotiroidismo, pero, como siempre, te recuerdo que si tenés dudas siempre consultes a tu médico de cabecera.

* Romina Pereiro es licenciada en nutrición MN 7722

* Producción: Dolores Ferrer Novotný / Realización: Gastón Taylor / Edición: Rocío Klipphan